Picasso se inspira en el arte negro; la etnografía nos descubre la maravilla del arte tribal; el arte primitivo se vende bien; contrabandistas venden en Occidente el arte de los países ?atrasados?; la civilización nos aburre; hay otras culturas. En esa tesitura, Sally Price despliega, entre divertida y enfurecida, un análisis particularmente incisivo contra la arrogancia estética occidental y por la hermandad de los pueblos.