La idea de la muerte del libro en papel viene siendo una constante amenaza en el panorama librero. No es nada nuevo, en 1894 se publicó en Francia El fin de los libros como un augurio del cambio de siglo y la ola de innovaciones tecnológicas. Y mucho más cerca, en 2006, Jeff Jarvis publicó en The Guardian el artículo Books will disappear. Print is where words go to die (Los libros desaparecerán. La imprenta es donde las palabras morirán) una especie de vaticinio fatalista de cómo la era digital acabará con el papel. Nada de esto ha pasado, cada día existen más editoriales y, con un proceso que guarda relación con la industria musical, el libro en papel parece que recupera un “papel” protagonista, a pesar de todo.
En este libro el diseñador y profesor de diseño en la Universidad de Cuenca, Jaime Narváez analiza este miedo atávico a la muerte del libro que se inicia con la creación de la imprenta, y analiza cómo la innovación tecnológica, y la llegada de la era digital, lejos de ser un enemigo es una herramienta que juega a favor del libro.
Jaime Narváez está detrás de una gran parte de las publicaciones, revistas y libros, fotolibros y libros de artista, que seguramente has visto y comprado, una producción que de alguna manera ha sintetizado en este pequeño libro que es una guía el diseño gráfico actual, de su historia a través de publicaciones, tendencias y herramientas. El libro tras el anuncio de su muerte cuenta en primera persona el camino avanzado en las últimas décadas de la mano de un diseñador que ha vivido día a día, libro a libro, proyecto a proyecto, una evolución que nos lleva a cómo se hace hoy, en plena era digital, con la IA a alcance de todos, los nuevos libros en papel. Una transformación que todos hemos vivido, explicada, analizada y comentada desde su lado más práctico y positivo. Una guía amable y didáctica de cómo y porqué hoy el libro en papel vive una época dorada y cuáles son las características de los libros que se hacen hoy y cómo se hacen.
El libro tras el anuncio de su muerte es una lectura amena, cercana a las experiencias de dos generaciones, imprescindible para diseñadores y estudiantes de diseño, pero también para editores, escritores y, por qué no, lectores y aficionados a los libros. ¡El libro ha muerto, larga vida al libro!
