Los paisajes del extrarradio de Madrid, previamente delimitados por el autor mediante una metodología de trabajo muy concreta, son el objeto de estudio de las imágenes de esta serie de Gerardo Custance. Su mirada, en palabras de Rosa Olivares, autora del ensayo encargado de contextualizar este proyecto del fotógrafo madrileño, se asemeja a la del cartógrafo. De hecho, al igual que el especialista en trazar mapas, Custance delimita primero el lugar, el área de estudio, el paisaje a representar. No obstante, y como siempre ocurre con la fotografía artística, su encuadre aporta algo más: la toma de conciencia de la pérdida y transformación de los espacios naturales de nuestro entorno más inmediato, unos espacios literalmente devorados por el incesante avance de las ciudades contemporáneas. Un cambio que no tiene nada de romántico ni de grandioso, pero que solamente mediante el objetivo del artista puede convertirse en algo más que en la crónica de una destrucción recurrente en nuestra cultura.
"Custance narra una historia triste contada con bellas imágenes, con sentido del humor y con ironía, pero sobre todo con la humanidad de una mirada joven que narra esta transformación sin efectismos y con tranquilidad. Rescatando aquello que queda de rescatable, mostrándonos los jirones que quedan de lo que fue, sin dramatismos, tal vez con algo de tristeza", Rosa Olivares.
Con las imágenes de Perímetro nos enfrentamos a las consecuencias del desarrollo y el supuesto progreso de lo humano. Un avance incansable, que parece no tener freno, y en el que todos, sin excepción, estamos implicados.